miércoles, 30 de noviembre de 2011

Tarde



30 de Noviembre del 2011

¿Por qué me miras así? Así pues. Pero si tú sabes cómo. ¿Crees que soy de fierro? Estas tan linda, más encima te pones eso.  Eres mala conmigo, yo aquí escribiendo y tu tan linda. Paro de escribir y te ahogo a besos. Espérame no más.  Oye no te arranques.
Ya. Otra vez esa mirada. ¿Qué quiere? Ven, dame un beso. No te vayas.
Para de pasearte con eso puesto por favor. No me mires así.  O bueno si me miras así, después aguanta no más.

***

-          De que te ríes. Me miras y te ríes. Que estas escribiendo. Ya pues déjame ver.- dice ella.

***

Si le muestro este escrito se acaba, si no se lo muestro no se entera nunca y quiero que se entere para que se sonría y me dé un beso y calme mi día.  Es como un regalo.  Ahora me está mirando y sé que está intrigada con lo que escribo.  La miro y se sonríe nuevamente.

***

Le mostré hasta el punto anterior, directo en el computador, mientras leía se movían rápidos sus ojos y su sonrisa se dibujaba de a poco.  Terminó. Me dijo que me amaba. Me dio un beso como yo quería.  Mi día comienza a calmarse. Se sonrió. Le pregunté si creía que yo estaba loco. Se sonrió otra vez. Y le dije que escribiría el final de la historia.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...